
La cineasta panameña Annie Canavaggio anunció hoy en conferencia de prensa el lanzamiento de la película Hijo de Tigre y Mula enlos cines del país a partir del 13 de marzo durante 3 semanas.
El equipo internacional que participó de la producción con la directora Canavagio está integrado por la productora María Neyla Santamaría, el guionista y productor de post Vicente Ferraz, el diseñador de sonido y música y sonido directo Richard Córdoba y el director de foto y cámara Carlos Arango.
La producción cuenta la historia detrás de las negociaciones que cambiaron el destino de Panamá y pusieron fin a casi 100 años de colonialismo, revelando los momentos más intensos de las discusiones diplomáticas entre Estados Unidos y Panamá que culminaron en la devolución del Canal.
Los grandes elementos de la película provienen de material de archivo inédito, en diferentes formatos, proveniente de los National Archives, televisoras de Estados Unidos, películas del GECU, y material invaluable de la Fundación Omar Torrijos. Además, cuenta incluye imágenes y documentos de archivo de periódicos, noticieros y reportajes de la época que nos transportan a los años de las negociaciones y nos muestran las emociones y los intereses en juego durante uno de los momentos más decisivos de la negociación.
De igual manera, la producción incluye entrevistas a los negociadores Aristides Royo, Adolfo Ahumada, Nicolás Arditto Barletta, Omar Jaén, Ricardo de la Espriella, amigos y moradores de Coclesito que conocieron directamente a Torrijos,
Según Canavaggio, “Hoy en día pocos panameños se cuestionan el hecho que somos dueños de un territorio antes ocupado por los Estados Unidos. Ya nadie se asombra de ver cómo un pequeño país logró poner al gigante de rodillas para firmar un Tratado justo para Panamá. Esa es la historia que quiero contar, la historia de las negociaciones detrás de la firma de los Tratados Torrijos Carter. Abuelos y padres deben llevar a sus nietos e hijos a ver la película para no perder esta parte de la historia, para saber por qué debemos defender lo que es y siempre fue nuestro”.
Para la directora, esta obra es muy importante en este contexto mundial y en un momento en que Estados Unidos cuestiona la pertenencia del Canal a Panamá. El propósito es que los jóvenes conozcan la historia de cómo se recuperó un área que siempre ha sido de Panamá y que se usurpó mediante un tratado que ningún panameño firmó.
Esta película fue posible gracias a las contribuciones del Fondo de Cine de Panamá, GECU, DICINE, la Fundación Omar Torrijos e Ibermedia.